Ahora que todo el mundo habla de cómo reducir el cortisol descubrí la Rhodiola, una hierba que se cultiva en las regiones frías y montañosas de Europa y Asia. Las raíces ayudan al cuerpo a adaptarse al estrés cuando se consumen, alivian la ansiedad, suprimen el cortisol y proporcionan resistencia general a los factores estresantes.

Como ella, otros adaptógenos –entre ellos ginseng, maca, tulsí, hongo reishi, ashwagandha y melena de león– son sustancias naturales, generalmente extractos de plantas o hierbas, que ayudan al cuerpo a adaptarse al estrés, mantener el equilibrio y promover la homeostasis. Se cree que mejoran la capacidad del cuerpo para resistir el estrés físico, emocional y ambiental, y apoyan la función del sistema nervioso, inmunológico y endocrino.

Les cuento sobre los beneficios del consumo de adaptógenos, pero antes les comento que es muy importante ser constantes en su consumo para notarlos. Dentro de sus cualidades, las más significativas son:

– Mejoran la energía y la resistencia física.
– Regulan las hormonas.
– Mejoran la función cognitiva y mental.
– Fortalecen el sistema inmunológico.
– Apoyan el sueño y la relajación.
– Mejoran el estado de ánimo.
– Protegen contra el daño oxidativo.

Además de todos estos beneficios, se ha observado que su uso prolongado no tiene efectos secundarios significativos. No dejes de consultar a tu médico y benefíciate de estas maravillas.