En un mundo atravesado por la incertidumbre, Uruguay se presenta como una rara avis: estable, predecible y con reglas claras.
Por Esteña Press
Uruguay
Tierra firme para invertir.
En un mundo atravesado por la incertidumbre, Uruguay se presenta como una rara avis: estable, predecible y con reglas claras. En un encuentro con más de 300 empresarios uruguayos y españoles —y con el presidente Pedro Sánchez como testigo— el ministro Gabriel Oddone defendió el modelo país: “somos garantistas, y eso también es parte de nuestro valor diferencial”.
Uruguay quiere más inversión, pero no a cualquier precio. El ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, dejó claro que la estrategia no es conquistar capitales con promesas volátiles, sino con lo que el país ya tiene: estabilidad política, institucional y jurídica. Y lo dijo ante un auditorio potente, con más de 300 empresarios y la presencia del presidente de España, Pedro Sánchez, de visita oficial en Montevideo.
Oddone destacó que Uruguay ofrece un ecosistema confiable para invertir, basado en más de medio siglo de políticas consistentes, apertura comercial y respeto al marco legal. “Nos enorgullece nuestra estabilidad. Es parte de nuestra identidad”, afirmó. No evitó la autocrítica: reconoció que esa misma solidez puede traducirse en lentitud para ejecutar cambios. “Pero estamos trabajando en eso”, dijo, y sumó que la experiencia española puede ser una hoja de ruta para avanzar con mayor dinamismo sin perder garantías.
En cuanto al contexto internacional, Oddone fue enfático: Uruguay no es ajeno a las tensiones del mundo. Cambios climáticos, tecnológicos y geopolíticos reconfiguran el mapa de oportunidades. En ese marco, sostuvo que el acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur es clave para reposicionar al país como actor activo y confiable. Pedro Sánchez coincidió: “Uruguay tiene una democracia y estabilidad sin parangón en América Latina. Es un socio de confianza”.
Con 7.600 millones de euros ya invertidos, España se consolida como el primer inversor extranjero en Uruguay. Pero hay más por hacer. Oddone propuso tres áreas clave para atraer capital: logística (para mejorar el acceso a mercados), agua (para garantizar el recurso a largo plazo) y energía (para exportar sol, agua y futuro).
Porque cuando el capital busca tierra firme, lo que más vale no son los incentivos, sino la confianza. Y Uruguay, en ese rubro, cotiza alto.